BISFENOL A EL NEGOCIO DE ENFERMAR A LA SOCIEDAD
Efectos del Bisfenol-A (BPA) en el organismo
La estructura molecular del BPA mimetiza la estructura de los estrógenos naturales. Luego, tiene la capacidad de alterar el sistema endocrino. El BPA constituye, por tanto, lo que se denomina un “disruptor endocrino”. Entre los efectos adversos cabe destacar:
Cambios en el comportamiento. Hiperactividad, agresividad
Diabetes y obesidad
Pubertad temprana
Reducción de la cantidad de esperma
Cáncer de próstata
Cáncer de mama
Alteraciones cromosómicas
Daño cerebral
Deterioro de la función inmune
Disminución de los niveles de antioxidantes enzimáticos.
Factores que condicionan la migración de Bisfenol A
La migración de BPA a los alimentos depende de multitud de factores. Entre ellos:
El tipo de plástico
El tiempo de contacto (a mayor tiempo, mayor migración)
La temperatura (a mayor temperatura, mayor migración)
El pH (la migración es mayor en bebidas carbonatadas y alimentos ácidos como la salsa de tomate o zumos de cítricos, o sea, de pH 7)
La degradación del plástico (edad, arañazos, etc)
El tipo de alimento
Para dar una idea de la migración del BPA a alimentos en conserva, se han detectado hasta del orden de 0.1 mg/kg en la carne, 0.02 mg/kg en el pescado y vegetales y frutas (González et al. 2011 y referencias allí citadas).
Verdades y conjeturas sobre el BPA
Se sabe con certeza que:
El 95% de los seres humanos presenta BPA en la orina.
El BPA es perjudicial para la salud y para el medio ambiente.
Se desconoce con exactitud cual es la dosis máxima de BPA que se puede considerar que no produce efectos adversos sobre la salud. Especialmente a largo plazo.
El PVC, resinas epoxi (presentes en recubrimientos interiores de latas de conserva y de refresco) y muchos policarbonatos, tienen BPA.
Los plásticos reutilizados con frecuencia, con arañazos, etc, liberan más BPA.
La temperatura y la acidez de los alimentos favorecen la migración del BPA.